Por Elena Valor.
Desde siempre se ha hablado de lo distintos que somos
hombres y mujeres y, especialmente, de lo complicadas que somos estas últimas.
Pero en realidad no es tan difícil. Señores, si quieren caer bien y gustar a las
damas solo tienen que aplicar unas sencillas reglas de cortesía que el
protocolo social ha incorporado aunque lamentablemente en algunos sectores
están cayendo en desuso.
A muchos de mis jóvenes alumnos de Protocolo les sorprende
lo que pueden mejorar las relaciones con las mujeres aplicando unas actitudes
tremendamente simples:
Abrir la puerta para dejarnos pasar primero, ayudarnos a
ponernos el abrigo, caminar por el borde de la acera mientras nosotras lo
hacemos por el interior para salvaguardarnos de salpicaduras de charcos y
peligros de conductores despistados, escucharnos con interés cuando hablamos
(chicas, por favor, procuremos evitar el parloteo insulso y decir tonterías), olvidarse del móvil cuando están con nosotras, cedernos el asiento en el transporte público, presentarnos, saludar y
despedirse primero de nosotras que de los hombres en un grupo, prestarnos la
chaqueta, jersey o sudadera cuando tenemos frío, tratarnos, en suma, como si
fuéramos importantes.
¿Alguna recuerda la grata impresión de ser saludada con un
besamanos? Después de la perplejidad ante una situación ya muy rara, la
sensación es muy agradable. (Aviso a los señores que quieran recuperar esta
costumbre casi perdida: El besamanos no consiste en besar el dorso de la señora
o señorita a la que se saluda, solo se hace el ademán).
Una mujer no es una delicada pieza de porcelana que puede
romperse con solo mirar, pero a todas, absolutamente a todas, nos gusta que nos
traten con deferencia y mimo. Seguro que alguna feminista defiende que hasta
que no se consiga la igualdad de trato no se obtendrá la igualdad de géneros,
pero ¿una mujer es menos porque la traten como a una dama?, ¿un hombre es
machista porque intente proteger a una mujer o tenga detalles con ella?
Dejémonos de teorías y reivindiquemos la educación, el mundo
es mucho más agradable con gente atenta.
Nos vemos a la próxima y como siempre
Cuídate y sigue tan cuap@